Por todos es sabido que practicar Mindfulness aporta una gran cantidad de beneficios a las personas que lo utilizan. Hasta hace unos años esta disciplina era algo desconocida por muchos, pero lo cierto es que desde que su fundador Jon Kabat-Zin la popularizó allá por 1971, no ha hecho más que ganar seguidores.
Si has llegado hasta aquí probablemente sea porque ya conozcas el funcionamiento de esta metodología y quieras empezar a usarla con tus hijos, sobrinos o alumnos. De todas maneras, si todavía no tienes muy claro qué ejercicios practicar en tu rutina de meditación, te aconsejamos que eches un vistazo al último post en el que te explicamos detalladamente las mejores técnicas para adultos. Verás que contra más controles tu propia técnica, mejor podrás ayudar a los practicantes más jóvenes.
Si tienes dudas de cómo aplicar un programa de Mindfulness para niños, te recomendamos la lectura de este post porque lo que viene a continuación te interesará. No sólo te proporcionaremos un listado con las actividades más beneficiosas y utilizadas para niños, sino que te mostraremos cómo aplicarlas para obtener los mejores resultados.
¿Qué beneficios tiene la atención plena en niños?
Cuando hablamos de los puntos fuertes de la meditación, lo primero que se nos viene a la cabeza es el hecho de que la relajación que nos proporciona nos ayuda a combatir la ansiedad y nos da herramientas para manejar el estrés.
Podemos pensar que justamente estos beneficios no son aplicables a los niños, pero lo cierto es que cualquier persona puede padecer este tipo de alteración. ¡Y qué mejor manera que aprender a controlarlas y eliminarlas mediante el uso de la Atención Plena! No obstante, esos no son los únicos beneficios del Mindfulness para niños.
Técnicas Mindfulness para niños: Las 5 actividades más utilizadas
De la misma manera que con las actividades para adultos, utilizar ejercicios Mindfulness para niños ocupará muy poco tiempo de sus rutinas diarias. Por ello, es importante que cada día dediquen un rato a llevarlas a cabo. De esta manera, será más fácil que se beneficien de todos sus aspectos positivos.
A continuación vamos a mostrarte los ejercicios de Mindfulness para adolescentes y niños más usados en el mundo de la educación infantil.
«La Campana»
Adquirir la atención plena puede llegar a ser un proceso un tanto difícil, sobretodo cuando tratamos que lo logren los más pequeños. La capacidad de concentración que tiene un niño suele ser menor que la de un adulto, ya que son más movidos e impacientes. Por ello, la mejor manera para alcanzar este estado de conciencia es hacerlo mediante divertidos juegos.
La campana permite que los jóvenes adquieran esa capacidad de concentración. ¿Cómo? ¡Verás qué fácil!
Coméntales que tienen que distinguir el sonido de una campana que puede sonar en cualquier momento. Así, en silencio y con los ojos cerrados, tendrán que prestar mucha atención a todo aquello que se pueda acontecer, ignorando a su vez, aquellos estímulos que no sean la campana en cuestión.
Una vez la han localizado, esta sonará durante un tiempo y los pequeños tendrán que estar concentrados en ella hasta que dejen de escucharla. En ese momento, deberán de levantar una mano para hacerte saber a ti que han sido conscientes de que el ruido ha desaparecido.
«Los astronautas»
Esta actividad es muy entretenida y además de ser un buen ejercicio de Mindfulness para adolescentes y niños, te dará la oportunidad de pasar un gran rato con tus hijos y familiares más peques.
Puedes empezar por proponerles dar una vuelta por el espacio exterior, ¿qué te parece? Y que se vayan encontrando objetos que no estén acostumbrados a ver ni utilizar. Puedes mostrarles frutas o diferentes alimentos, utensilios de cocina no peligrosos o simples objetos de escritorio.
La finalidad es que describan aquellos objetos que descubran con los 5 sentidos y que además, expliquen qué les hacen sentir. La textura, el olor, el sabor, si produce algún tipo de ruido, etc. Y sobre todo que hagan una observación sobre su experiencia con la pieza en cuestión y sobre las sensaciones que han tenido al analizarla.
«El hombre del tiempo»
Cerrando los ojos, los niños tendrán que intentar ser conscientes de cómo se siente el cuerpo. Por ello, les propondremos ser los hombres del tiempo de su cuerpo y mente. Si está relajado y feliz podrá decir que hay un sol brillante y espectacular. Si por el contrario hay cosas que le preocupan, significará que las nubes han tapado la claridad del cielo y puede que incluso se estén preparando para provocar una tormenta.
Nosotros, como adultos, debemos guiarles durante el proceso preguntándoles sobre el tiempo que está haciendo en su interior. Así, les ayudamos a que se expresen ampliamente y se animarán a participar activamente en la actividad.
Con esta actividad conseguirán afianzar las habilidades de observación de sus sentimientos. Esto es especialmente beneficioso porque les permitirá reconocerlos y comprenderlos.
«Respirar con amigos»
Este ejercicio es similar al ejercicio de atención a la respiración que te proponíamos para adultos. De hecho, la idea de la actividad es la misma: ser conscientes de la respiración y de los movimientos corporales que se ocasionan en el proceso.
Para empezar, una persona se tumbará o sentará cómodamente con los ojos cerrados y se dedicará a respirar profundamente. A la vez, un amigo, familiar e incluso el adulto que lo supervisa, puede ser su compañero. Este se ocupará de centrarse en la respiración del otro y ser consciente de cómo el cuerpo se mueve con el paso del aire. Es importante que descubran qué partes del cuerpo se «accionan» cuando esto ocurre.
Una vez los pequeños saben cómo es ese movimiento corporal, podrá proceder con la numeración de las diferentes inspiraciones y expiraciones. Contarán del 1 al 10: un «1» para la primera inhalación de aire, «2» para la primera exhalación. Y así hasta 10. Esto se podrá repetir un par de veces, dependerá del tiempo del que dispongáis.
«Seamos ranas»
Con «seamos ranas», propondremos a los pequeños que se conviertan en ranas, puesto que son animales que siempre están saltando de un lado para otro pero que también son capaces de permanecer quietos y concentrados cuando es necesario. Con esta idea lo que queremos transmitir es la importancia de saber parar unos minutos al día para que la mente fluya libremente sin entorpecerla con cosas del día a día.
Así, los menores deberán permanecer quietos con los ojos cerrados permitiendo que la mente piense en lo que ella quiera. Sin analizar ni juzgar esos pensamientos, solo dejándolos que vengan unos tras otros. A su vez, realizarán unas respiraciones profundas que les ayudarán a relajarse y desarrollar la actividad correctamente. También se recomienda que sientan el movimiento del cuerpo mientras respiran y ser conscientes de ello.
Descargar Ejercicios en PDF
En el link que encontrarás a continuación podrás descargarte los ejercicios de Mindfulness para niños en pdf para que dispongas de ellos en cualquier parte.
TIPS para una buena práctica del Mindfulness infantil
Como habrás visto en el apartado anterior, alcanzar la atención plena con niños o adolescentes es algo sencillo pero que requiere práctica. Por ello, vamos a darte los consejos definitivos para que esta hazaña sea lo más efectiva posible.
Tener constancia y dedicarle tiempo
Parece un tópico, pero es muy importante ser paciente y llevar a cabo una rutina de meditación que se pueda cumplir perfectamente. Cuando empezamos con las excusas, solemos acabar por abandonar la actividad. Además, estas técnicas ocupan muy pocos minutos y los beneficios son realmente evidentes con el tiempo.
En el caso de los más peques, con realizar la atención plena en sesiones de 4-5 minutos (niños) o de 5-10 minutos (adolescentes) 3 o 4 veces por semana es suficiente. Eso sí, si pueden dedicarles unos minutos cada día, ¡mejor que mejor!
Encontrar el mejor lugar
Encontrar un lugar tranquilo es vital para realizar las actividades con éxito. Sobre todo al principio, cuando los pequeños son menos capaces de ignorar estímulos que no interesan. Así, sería ideal tener un sitio fijo en el que practicar la atención plena y donde no se produzcan interrupciones. Con la práctica, es probable que podáis meditar en otros ambientes menos tranquilos.
Actitud y perseverancia
Como en cualquier ámbito de la vida, tener una buena predisposición nos ayuda a alcanzar el éxito en aquello que hacemos. Y en el campo del Mindfluness esto no iba a ser menos. La buena actitud es imprescindible en la ejecución de estas técnicas, ya que será más fácil entenderlas y aplicarlas. Es muy normal que al principio les cueste más, sobre todo a los más pequeños. Eso sí, seguro que la actitud y la motivación que tengan les ayudará a conseguir los objetivos marcados.
Si por lo que sea te es imposible motivar a tus hijos, familiares o alumnos y crees que necesitas una dosis extra de conocimiento respecto al tema, te recomendamos que eches un vistazo a «Un Bosque Tranquilo», el libro que te proponemos a continuación. Es un cuento que te ayudará a enfocar la meditación en los más peques.
Desde mindfit.club te animamos a que adentres en el mundo de la atención plena a esos niños y adolescentes que tengas más cerca y los acompañes durante el camino. ¡Muéstrales cómo gozar de todos sus beneficios!