Los protectores solares son sin duda uno de los productos que no pueden faltar en nuestro día a día, de hecho se han convertido en un cosmético estrella a la hora de hablar de una rutina facial, ya que aunque son el último paso de ésta, es de los más importantes.
Seguro que todos sabemos para que sirve, porque su propio nombre lo dice… nos protegerá la piel de los rayos solares, evitando quemaduras, manchas y problemas de salud como cáncer de piel y otros.
Sin embargo seguro que has oído hablar de ellos de forma negativa en muchas ocasiones, esto es debido a que hay algunos productos que contienen filtros nada recomendables para preservar la salud de nuestra dermis, por lo que debemos tener cuidado con lo que elegimos y usamos.
En el artículo de hoy vamos a hablar de cómo aplicar un solar, para que no tengáis dudas en este momento tan importante para nuestra dermis. Así que ¡allá voy!
Antes de comenzar os voy a dejar una lista con las opciones más interesantes del mercado que hemos analizado previamente.
Elige un buen protector
Antes de comenzar con los pasos a seguir, creo que es esencial hablar de que elegir un cosmético de buena calidad es el paso más importante de todos, ya que si aprendemos a usar de forma correcta un protector pero sin embargo éste no es bueno, la realidad es que los resultados no serán lo esperado.
Es por ello que, además en un producto con tantas opciones, es importante conocer qué aspectos hacen que un solar sea bueno.
Lo ideal es que prestas atención a los protectores que recomiendan los dermatólogos, ya que ello son los expertos en el funcionamiento de la piel.
Fíjate que tenga filtros físicos no nano
Olvídate de elegir un protector químico, lleno de sustancias químicas que penetran en nuestra piel y producen reacciones importantes, ya que sin duda son la peor de las elecciones para la salud de nuestra piel. Aún así, si os preguntáis si protegen del sol, la respuesta es sí, pero ¿a que precio?.
Los filtros químicos han demostrado producir daños en nuestro sistema endrocrino a largo plazo, ya que son capaces de penetrar hasta las capas más profundas de la dermis y allí producir una reacción química que puede provocar irritaciones y otros síntomas.
Por otro lado, las nanopartículas también son muy importantes, ya que si éstas están presentes quiere decir que el filtro solar se encuentra en moléculas muy pequeñas y puede penetrar hasta llegar a nuestro torrente sanguíneo.
Es por ello que antes de comenzar con los pasos a seguir, debéis saber que elegir un buen producto es esencial para unos buenos resultados, saludables y efectivos.
Nuestra recomendación es elegir un cosmético que tenga ingredientes lo más naturales posibles, con un INCI escueto y concreto y lo más importante, con filtros físicos (minerales) no nano.
Y en la medida de lo posible, optar por protectores solares biodegradables.
Asegúrate que tenga un SPF alto (30 o más)
Y otro de los aspectos más relevantes es que su SPF sea superior a 30, ya que son los únicos niveles que nos asegurarán una protección efectiva.
Normalmente los más elegidos son los de SPF50, ya que son el máximo actualmente.
No te fíes de un producto con un SPF15 o 20, ya que no serán seguros del todo, debido a que impiden un porcentaje inferior de impacto de rayos solares en la piel y por lo tanto corremos el riesgo de quemarnos o sufrir otros problemas.
Aprende a aplicar el protector solar paso a paso
Ahora sí, lo más importante de todo, conocer los pasos a seguir para que el momento de aplicación sea el correcto.
Es muy muy sencillo, pero debemos hacerlo bien para no dejar ninguna zona sin cubrir, así que ¡atentos!
- Lo primero que debemos hacer es tener claro que hay que ponerlo aproximadamente 30 minutos antes de exponerte al sol.
- Sabiendo esto, en el momento de ponerlo debéis usar una buena cantidad, no tengáis miedo con pasaros, en este caso (a diferencia de otros pasos de la rutina) es mejor pasarnos que quedarnos cortos.
- Cubrir todo el cutis o zona del cuerpo a tratar con una buena capa de producto. Asegurate que todas las zonas están cubiertas, incluidas aquellas que se nos suelen pasar, como los laterales de la rariz o las orejas.
- Para extenderlo bien es necesario lo ideal el masajear la piel con suavidad pero decidida, de esta forma se absorberá mejor.
Estos son los sencillos pasos para aplicar un solar de forma satisfactoria, ahora bien, no te creas que solo es ponerlo una vez y listo… este producto hay que re-aplicarlo cada 2 horas aproximadamente.
Preguntas frecuentes acerca del uso del protector solar
Ahora vamos a hablar un poco de todas aquellas dudas que pueden surgir en el momento de utilizar este tipo de cosméticos, que aunque es cierto que se aplica fácilmente, siempre hay preguntas que es mejor tener atadas.
¿Qué cantidad necesito usar?
Como ya te he dicho más arriba, a diferencia de un suero o una hidratante que siempre decimos que debemos ir poco a poco para no excedernos y engrasar la dermis, con el protector es todo lo contrario.
Tampoco es plan de untarte hasta quedar blanca del todo, pero sí que se debe usar una buena capa de producto, ya que es el único que nos protegerá de los rayos del sol, con lo cual, debemos estar seguros de que va a poder hacer bien su función.
¿Puedo utilizar el mismo producto para la cara y para el cuerpo?
La pregunta estrella es esta, porque está claro que todo lo que nos podamos ahorrar ¡mejor!, pero hay que tener una cosa clara y es que la dermis del cuerpo y del rostro a pesar de ser iguales, tienen una pequeña diferencia y es que nuestro cutis suele ser más sensible.
Mi recomendación es que si queréis tener un producto para todo, compréis un solar que lo indique en su envase o que la marca lo recomiende así, ya que de lo contrario podríamos tener algunos problemas o incluso malgastar el dinero, te cuento porqué.
Si compráis un solar en el cual se indique que es para usar en la cara, normalmente éste vendrá en una cantidad relativamente pequeña (unos 50ml), ya que la zona a cubrir es pequeña y no necesitaríamos un tamaño mayor.
Por otro lado, también suelen tener un precio mayor al contener otros activos como pueden ser hidratantes u otros que serán necesarios para tratar el cutis, por lo que si lo usáis en el cuerpo no os durará nada y tendréis que comprar otro en pocos días.
Sin embargo, si compráis un producto exclusivamente para el cuerpo, seguramente sea mayor (100 ml o más), sea un poco más económico pero no sea del todo seguro para la piel del rostro.
Por lo tanto, elige siempre aquel que se adecue más al uso que le vayas a dar.
También podéis hacer un protector en casa con algunas recetas que os dejo por aquí, pero antes de nada informaros muy bien de este tipo de productos caseros, en ese artículo os lo explico con detalle.
¿En qué momento se aplica el solar?
Otra de las dudas más frecuentes es que no sabemos en que momento de la rutina facial tiene lugar este producto, ¡pero es muy sencillo!
Normalmente en una rutina debemos usar los cosméticos por la textura, es decir, después de la limpieza (siempre lo primero), lo ideal es usar un producto fluido como por ejemplo un sérum, después uno un poco más consistente como una crema facial y finalmente el protector solar que suele ser mucho más espeso.
En principio podríamos decir que es el último paso de la rutina antes de salir de casa.
Si os vais a maquillar, fijaos bien que el protector que utilicéis sea apto como prebase para el maquillaje.
Si lo que buscas es algo más ligero y que no deje ningún tipo de resto en la piel, lo ideal es que te compres una bruma facial.
¿Cuándo hay que volver a aplicarlo?
Esto es algo que debemos tener muy claro, el solar no es un producto que nos pongamos por la mañana y hayamos terminado con él, es un producto que debemos llevar encima todo el día para ir aplicándolo de nuevo.
Se recomienda re-aplicarlo cada 2 horas aproximadamente, ya que es el tiempo que dura la protección efectiva.
Ahora bien, si estamos en la playa, en la piscina o hemos sudado mucho, lo ideal es aplicarlo después de cada baño o del deporte que hayamos hecho.
Y esto debe ser así incluso con aquellos que son resistentes al agua, ya que es la única manera de asegurarnos una protección total.
Espero que con toda esta información, tengáis claro cómo hay que usar este producto tan indispensable para nuestro día a día.
Además, espero haberos ayudado a solventar algunas dudas que puede que tuvierais, ahora ya ¡solo queda que os pongáis manos a la obra!
Recordad que además de utilizar un buen solar de calidad, es muy importante evitar las horas de sol más fuertes, ir siempre por sitios con sombra y hacer uso de prendas como gorras, sombreros, etc, para evitar que la cantidad de rayos que impacten en nuestra piel sea la menor posible.
Con todo esto… ¡luciréis una piel bonita y saludable siempre!