Seguramente llevéis varios años escuchando la palabra vegano a la hora de comprar vuestros cosméticos y es que la realidad es que las búsquedas han cambiado de hace un tiempo para acá, afortunadamente cada vez son más las personas que buscan cuidar de sus ojos, su piel o su cabello sin la necesidad de perjudicar a nadie más.
Hoy en día podemos encontrar innumerables opciones en el mercado que se comprometen con la vida de forma general, por lo que no usarán ingredientes procedentes de otros animales para fabricar las cremas típicas antiarrugas, hidratantes, iluminadoras etc u otros productos como los sérums, lociones corporales, etc. Siempre hay una alternativa que puede ofrecer los mismos o muy similares resultados.
En este artículo vamos a hablar sobre la cosmética vegana y todo lo que necesitamos saber sobre ella, ya que muchas personas optan por ella y buscan de forma incansable opciones libre de sufrimiento pero ¿lo sabemos todo sobre ella?
Al principio parece muy lioso y hasta podemos frustrarnos un poco pero es mucho más sencillo que todo eso, os voy a ayudar a que seáis completamente unos maestros de la cosmética vegana y todo lo que tiene que ver con ella.
¿Qué es la cosmética vegana?
Tal y como hemos dicho antes, esta corriente no es más que el hecho respetuoso de elegir y utilizar productos cosméticos evitando los ingredientes procedentes de animales, es decir, optando siempre por alternativas éticas al uso de estos animales, como por ejemplo ingredientes de origen vegetal.
No solo se aplica a la cosmética sino que el veganismo se ha extendido y se extiende de manera rápida por todos los ámbitos de la vida, tanto en la alimentación, como en el mundo de la moda, etc.
En definitiva, podemos mencionar que el veganismo es un estilo de vida saludable y respetuoso con el planeta en general, por lo que se podría decir que toda persona que se posicione en el amor hacia la naturaleza elegirá la opción más ética y consciente.
Dicho esto, es el momento de pasar a hablar sobre cómo diferenciamos un producto vegano o sobre cuales son las diferencias entre vegan y cruelty free, así como otras cuestiones que encontraremos en nuestro día a día, así que ¡comencemos!
Aspectos a tener en cuenta al hablar sobre cosmética vegana
Como hemos visto hay muchas dudas aún con este tema y es por ello que quiero abordar los aspectos más principales para que solucionéis las incertidumbres más comunes.
Cosmética vegana y cruelty free, ¿en qué se diferencian?
Aunque muchas veces pueda conducir a error, estos dos términos no tienen nada que ver entre sí, la cosmética vegana es la fabricación de un producto sin utilización de sustancias de origen animal pero no por ello quiere decir que sea cruelty free. Por otro lado esta última se refiere a que la marca no ha testado ese producto en animales pero de igual forma no tiene porque ser vegano.
En resumen y para que se vea de forma más clara os lo esquematizo aquí abajo:
- Cosmética vegana: No utiliza ingredientes de origen animal.
- Cosmética cruelty free: No ha sido testado en animales.
Debemos tener mucho cuidado con esto, ya que muchas marcas juegan con la falta de información y venden sus productos como respetuosos y amigable con todos los seres vivos pero resulta que falla en alguna de los dos términos anteriores, por lo que sin duda sería genial que nos asegurásemos de ambos.
En Europa está prohibido testar en animales desde 2013
Probablemente no supieseis esto pero desde el año 2013 Europa prohibió a todas las marcas de cosméticos el hecho de testar con animales, por lo que todos aquellos productos que se fabrican y se comercializan en Europa están libres del testeo animal.
Ahora bien, hace años (antes de esta ley) surgieron muchas ONG que se dedicaron y actualmente aún se dedican a luchar contra este cruel proceso como es el caso de PETA O Leaping Bunny, estas organizaciones ofrecen certificaciones privadas como un sello de cruelty free, aunque en realidad hoy día ya no sea del todo necesario porque en teoría ningún producto que se venda en Europa puede ser testado en animales.
A pesar de todo ello, esa ley tiene una doble cara, en ella destaca que hay excepciones como por ejemplo el hecho de asegurar que el ingrediente o el cosmético en sí no sea dañino para la salud cuando las pruebas alternativas no se consideran suficientes. Esto es algo que como consumidores no podemos controlar y por ello el gran debate.
De la misma forma, puede ser que nos encontremos con sustancias que se usen con fines de limpieza o farmacéuticos, de esta manera puede que se haya testado ya en ese campo y por lo tanto no haga falta hacerlo de nuevo en cosmética, pero fin de cuentas lo han llevado a cabo.
Y así muchos otros aspectos que crean confusión con este término. Es por ello que siempre se aconseja (por la salud nuestra y por la de los demás) elegir siempre aquellos productos con ingredientes lo más naturales posibles, además de preguntar en caso de duda al fabricante que está en la obligación de aclarar dicha incertidumbre.
¿Cómo saber qué se trata de un cosmético vegano?
Cada día miles de personas compran cosméticos, seguramente nosotros estemos dentro de ese grupo alguna que otra vez, pero ¿cómo sabemos si el producto cosmético es realmente vegano? Muy fácil, sus ingredientes nos lo dirán, además de que puede que cuente con un sello específico que nos lo muestre en el envase.
Lo primero que debemos hacer siempre es fijarnos en el INCI del producto y comprobar que no haya presente ninguna sustancia procedente de animales pero como muchas veces hay ciertos ingredientes que ni siquiera imaginamos que vengan de animales y los dejamos pasar por alto, os nombraré aquí aquellos que son más comunes:
- Creatina (huesos molidos)
- Hialurón (cresta de gallo)
- Lanolina (grasa de lana)
- Cera de abejas
- Leche
- Colágeno (a menudo escamas de pescado o cartílago bovino)
- Barniz de cáscara (producto de excremento del insecto). A menudo en esmaltes de uñas y lacas para el cabello
- Carmín (insectos triturados)
- Gelatina (se extrae de los cerdos)
- Glicerina animal
- Aceites procedentes de animales (ballenas, tortugas, etc)
Como estos hay muchas más sustancias que se extraen de los animales con el único fin de fabricar productos cosméticos que nos gusta comprar para cuidar de nuestra piel, hoy en día se conoce que es completamente innecesario todo ese proceso doloroso y cruel, ya que existen multitud de alternativas vegetales y respetuosas con todos.
Posibles alternativas respetuosas con la vida animal
- El ácido hialurónico se puede obtener de forma satisfactoria mediante biosíntesis a partir de cereales o celulosa, un proceso completamente natural y sin causar daños en nadie.
- El Colágeno se puede extraer de proteína vegetales seleccionadas con conciencia a partir de determinadas plantas.
- El color rojo no tiene porque ser necesariamente Carmín (proceso responsable de miles de muertes de insectos), sino que se pueden conseguir pigmentos naturales de plantas, frutas u otros procesos.
- La Glicerina no tiene porque ser animal, también la encontramos de forma vegetal y es igual de efectiva.
Y así un largo etc, está claro que hoy en día no es necesario ninguno de los procesos en los que alguien tenga que sufrir, estamos realmente avanzados para dar con una alternativa que seguramente sea incluso más saludable para nuestra piel e indirectamente para nosotros de forma general, ya que al ser más respetuosas con el planeta de una manera u otra también nos beneficia a todos.
¿Dónde está la diferencia con la cosmética natural?
Como su nombre lo indica, los cosméticos naturales se definen por materias primas «naturales», por lo que excluyen ingredientes dañinos como parabenos, siliconas y fragancias y no utilizan ingeniería genética.
Pero cuidado con los ingredientes, ya que no se posiciona con productos de origen vegetal, sino natural, por lo que la leche o la miel son naturales (no sintéticos) pero sin embargo no son veganos.
Es por ello que no nos podemos dejar llevar por este término, ya que son dos cosas completamente diferentes. Ahora bien lo ideal siempre será conjuntar las dos y elegir aquellos productos que nos mezclen la naturalidad con el respeto hacia la naturaleza de forma general.
Razones por las que usar cosmética vegana
Después de aclarar todo lo relacionado con esta cosmética, voy a daros razones más que suficientes para os paséis al lado respetuoso, ético, solidario y empático de la cosmética vegana:
Evitamos el uso de ingredientes sintéticos
Si nos paramos a pensar, ¿cuántas personas hay hoy en día con problemas en la piel, con alergias, reacciones o incluso enfermedades?, estas patologías han ido en aumento con el paso de los años y aún sigue creciendo, por lo tanto está claro que hay algo que está fallando en nuestro día a día.
¿Y si lo que falla es el uso excesivo de sustancias tóxicas, sintéticas y artificiales?, desde luego todos sabemos que buenas no son y que más tarde o más temprano terminarán dando la cara. Ya vivimos en un mundo en el que la contaminación está tan desarrollada que nos va enfermando poco a poco, ¿por qué no cambiamos, si está en nuestra mano, el origen de nuestros productos cosméticos?
La cosmética natural nos beneficiará enormemente en la piel y aunque es cierto que un producto vegano no necesariamente tiene que ser natural, os animo a que siempre elijáis aquellas opciones más naturales posibles, solo así podremos ahorrarnos daños extras que no aportarán absolutamente nada positivo.
Respeta a los animales
Debemos asegurarnos que además de vegana sea cruelty free, de esta forma podremos estar tranquilos de que nuestro cosmético está completamente libre de cualquier crueldad animal. En su lugar se utilizan materias primas que se extraen de plantas, extractos, frutas, alimentos vegetales en general.
Es sin duda la forma más pura de amor hacia nuestro cuerpo y nuestro planeta, si lo pensamos es una incongruencia cuidar de nuestra dermis mientras condenamos a otros animales para ello. Por lo tanto elegir la cosmética vegana es la forma más respetuosa y empática de cuidarnos.
Mayor concentración de ingredientes activos (si es natural)
Ya sabemos que no necesariamente estos productos tienen porque ser naturales, pero es muy común que vayan de la mano y como ya hemos dicho debemos hacer todo lo posible porque así sean los que vayamos a utilizar.
De esta forma nos encontraremos con formulaciones realmente maravillosas, repletas de activos dispuestos a cuidar de nuestro rostro (lavarlo con limpiadores específicos, tónicos, mascarillas, etc) y conseguir grandes beneficios, por lo que estaremos evitando a toda costa los típicos productos con una lista enorme de composición repleta de ingredientes de relleno, que no aportan nada y que simplemente lo hacen para abaratar costes.
Recordad siempre que nosotros somos naturaleza y si nos cuidamos con más naturaleza, los beneficios se multiplicarán y serán extraordinarios. Trabajarán de forma tan afín a nosotros que los resultados serán infinitamente mejores.
Dejaremos una huella más positiva en el medioambiente
Hoy en día todo lo que hacemos va a suponer de una manera u otra un impacto en el medioambiente, por lo que lo ideal sería reducir esa huella en la medida de lo posible con todo lo que esté en nuestra mano, de esta forma evitaremos la utilización de ingredientes tóxicos, producciones contaminantes, etc, así como evitaremos el uso de animales para fabricar los productos, algo que sin duda también ayudará enormemente a minimizar ese daño constante que le producimos al planeta.
Es por ello que podemos decir que la cosmética vegana y natural tiene un impacto mínimo en el planeta, reduciendo a niveles muy bajos la contaminación de este.
Apuesta por la cosmética natural: Ventajas y desventajas
Ya hemos dicho que lo ideal es mezclar estos dos términos, vegana y natural, si lo hacemos habremos ganado muchos puntos en la salud de nuestra dermis y en general en la del medioambiente, pero además hay muchas otras ventajas y es justo de lo que vamos a hablar ahora, también veremos si hay alguna desventaja y las abordaremos.
Ventajas
- El poder de limpieza de un producto natural es igual al de los productos convencionales, es cierto que quizás hagan menos espuma pero esto se equilibra con una limpieza más suave, especialmente recomendada para pieles sensibles y propensas a las alergias.
- Las sales antitranspirantes de aluminio se consideran carcinógenas. Estas y otras sustancias químicas son dispensadas y en su lugar, se utilizan fragancias naturales y cubren el olor del sudor.
- Los dermatólogos generalmente recomiendan evitar la exposición excesiva al sol. Sin embargo, en términos de agentes protectores, se recomienda usar agentes minerales en combinación con ropa protectora adicional.
- Los productos naturales son menos agresivos y causan menos daño al cabello, al cuero cabelludo y a la piel.
- El consumidor no carga su piel con sustancias artificiales, en su lugar, puede estar seguro de comprar un producto respetuoso, hecho, por ejemplo, a partir de aceites crudos y naturales.
Desventajas
- Los productos de cosmética natural hacen mucha menos espuma, pero esto es algo que ya hemos visto en las ventajas.
- Los desodorantes o antitranspirantes con ingredientes totalmente naturales no pueden inhibir la producción de sudor, aunque si atenuarlas mucho.
- Al teñir el cabello, los tintes naturales salen del color del cabello inicial. En consecuencia, el pelo gris no está completamente cubierto.
- Los cosméticos de origen natural suelen tener fecha de caducidad cerrada, ya que no contiene conservantes o son naturales.
Espero que con toda esta información sobre cosmética vegana, cruelty free y natural os haya quedado claro los términos y por lo tanto podáis encontrarlas al cien por cien, en definitiva os diré que si todos cuidamos del planeta, todos saldremos victoriosos y el primer paso siempre será ser respetuoso con todo aquel que tenga vida y sienta igual que nosotros, así que ¡opta por la cosmética vegana siempre!