Estas conocidas flores, son un remedio homeopático conocido desde hace décadas que en los últimos años se está mostrando como una alternativa natural e inocua para tratar ciertos problemas emocionales, tales como la ansiedad, el estrés o incluso el insomnio.
Este tipo de remedios florales, pueden ser combinados con cualquier otro tratamiento homeopático o alopático porque no presentan efectos secundarios ni nocivos de ningún tipo aunque tiene como contrapartida que no es un tratamiento que sea universal, esto es, no existen remedios florales válidos para cualquier persona sino que hay que estudiar cada caso de manera individualizada.
Por esta razón, antes de comenzar un tratamiento de este tipo es importante dejarse asesorar por terapeutas florales bien formados o conocer a fondo en qué consisten las flores de Bach.
Una vez que decididos a iniciar un tratamiento de este tipo, es momento de saber Cómo tomar las flores de Bach, así que a continuación os mostramos algunas indicaciones sobre los pasos a seguir, junto a otros aspectos que consideramos importantes.
4 formas de tomar las flores de Bach
Las flores se pueden tomar de varias maneras, siendo las más habituales el método del gotero o frascos de tratamiento, el método del vaso de agua o de manera directa.
1. El método del vaso de agua
Necesitaremos unos frascos con gotero, que habitualmente se compran a través de internet o en tiendas de productos homeopáticos, con una capacidad de 10 ó 20 ml. Estos frascos con gotero incluyen las esencias florales sin diluir y tomarlas así no es muy recomendable.
Dependiendo del modo de consumir estas esencias florales, su efecto sobre el organismo será uno u otro. Para los estados de ánimo a corto plazo es más aconsejable el método del vaso de agua.
Esta opción consiste en poner dos gotas de esencias en un vaso o un botellín de agua y tomar sorbos tantas veces como se deseen hasta sentir alivio emocional. Si el remedio a utilizar es el Bach Rescue, hay que añadir cuatro gotas al vaso de agua en lugar de dos.
El método del vaso de agua puede ser también utilizado para tratar problemas a largo plazo. En este caso han de darse al menos cuatro sorbos al preparado durante el día. El preparado ha de mantenerse en la nevera o bien preparar un vaso fresco cada día.
2. Método del gotero
Diseñado especialmente para problemas más crónicos, este método consiste en preparar un frasco de tratamiento a partir de flores concentradas.
Los pasos a seguir son los siguientes: utilizar un frasco gotero de 30 ml, llenar el frasco hasta tres cuartos de su capacidad con agua mineral o depurada.
A continuación se añaden tres gotas de cada flor hasta un máximo de siete flores o bien cuatro gotas del Bach Rescue. Por último, se completa el recipiente con alcohol homeopático, vinagre o glicerina vegetal.
De este frasco se pueden tomar cuatro gotas cuando se sienta necesidad pero con un mínimo de cuatro veces al día.
Estos frascos de tratamiento se conservan durante un periodo aproximado de tres semanas si se mantienen en un lugar fresco, si bien el uso del alcohol o la glicerina tiene como objetivo preservar por más tiempo estos remedios.
3. Tomarlas directamente, ¿cómo debo prepararlas?
Una tercera opción de tomar las flores de Bach es hacerlo de manera directa, sin diluir, las esencias florales concentradas. Hay que tomar el mismo número de gotas siguiendo este método que cuando se toma en un frasco gotero o diluidas en agua.
La dosis es similar, dos o tres gotas si se trata de flores individualizadas o remedios específicos y cuatro para el remedio de rescate. Se pueden tomar las gotas tantas veces como sean necesarias.
4. Añádelas en el agua de la bañera
Este cuarto método sólo debe utilizarse de una forma complementaria a las dosis que ya tomamos por vía oral, de estas esencias florales. Hay que añadir 5 gotas la esencia que hayamos elegido y verterlas cuando el agua de la bañera esté tibia.
Enseguida, nos sumergiremos durante unos minutos y nos secaremos con la ayuda de una toalla, sin frotar el cuerpo, sólo mediante pequeños toques, para no arrastrar las esencias.
A los bebés, también podemos aplicarles las gotas de este modo, añadiéndolas en el baño; también se les puede aplicar el tratamiento colocando directamente las gotas sobre las muñecas.
Antes de continuar, debemos tener una cosa muy clara: este tratamiento no se rige por la cantidad, sino por la eficacia. Para que estas esencias hagan el efecto que tanto deseamos, lo más importante es tomar cada día la dosis indicada y ser muy constantes.
¿Cómo tomar las dosis?
En cuanto a las tomas, no se trata de fijar unas horas al día de una forma repetitiva, sino que se aconseja ir tomando las gotas repartidas a lo largo del día, distribuyéndolas para que el tratamiento resulte de este modo más efectivo.
Lo normal, es realizar una toma en cuanto nos levantamos, seguida de otra toma por la tarde y una última toma justo antes de irnos a dormir.
Si te olvidas de alguna toma, no se aconseja duplicar la siguiente dosis, ya que no repercutirá en los beneficios que vamos a obtener.
Debes tomarlas 2o minutos justo antes de comer o después de las comidas y mantenerlas durante al menos unos segundos en la boca.
Al iniciar un tratamiento nuevo, muchas veces tenemos la sensación de necesitar tomar la dosis con algo más de frecuencia, pero, sobre todo escucha bien tu cuerpo y realiza las tomas con cautela.
Cada persona es completamente libre de elegir el momento adecuado para sus tomas pero, recuerda que es importante espaciarlas y repetir esta acción siempre a la misma hora.
Como hemos indicado, dos momentos en que las flores son particularmente efectivas es justo tras despertar y antes de dormir. En este último caso es imprescindible si la opción escogida es el Bach Rescue Night.
Dosis habituales
La primera vez que una persona toma flores de Bach es adecuado que se sensibilice rápidamente al tratamiento. Así vemos que durante el primer día puede tomar cuatro gotas cada diez minutos durante la primera hora, cuatro gotas cada veinte minutos durante la segunda hora y a partir de la tercera hora, cuatro gotas por hora.
En el segundo día puede tomar cuatro gotas cada hora durante todo el día, y ya a partir del tercero, iniciar el tratamiento normal de cuatro gotas cuatro veces al día.
En casos de tratamientos con flores de Bach, no hay ningún problema en incrementar la frecuencia, pero lo que sí ha de respetarse es la cantidad de gotas a tomar, cuatro gotas cada vez que se apliquen.
La dosis habitual de flores de Bach a tomar es cuatro gotas y cuatro veces al día, eso como mínimo. En algunas ocasiones es necesario reforzar la acción de ciertos remedios, de modo que se puede incrementar la frecuencia de las tomas pero en ningún caso se debe modificar la dosis de cuatro gotas.
Para aquellas situaciones de emergencia o en periodos en los que se esté afrontando una crisis se pueden tomar cuatro gotas cada cinco minutos durante la primera media hora, en la segunda media hora cuatro gotas cada diez minutos y a partir de la hora, cuatro gotas cada veinte minutos hasta que se supere esa situación de emergencia.
¿Qué flores necesito? ¿Cómo saberlo?
Cada una de los 38 flores de Bach está indicada para tratar un estado emocional distinto negativo, por lo que una correcta elección hará que el tratamiento con estas esencias florales sea más o menos efectivo.
Para seleccionar las flores a tomar existen dos opciones, la primera de ellas es acudir a un terapeuta floral y la segunda es elegir y comprar por nosotros mismos las esencias florales.
Por norma general, no existe ningún inconveniente en elegir las flores personalmente, si bien es cierto que para estados emocionales crónicos es más apropiado acudir a un terapeuta floral que ayudará a encontrar el origen del desequilibrio.
Qué hacer cuándo finaliza el tratamiento
Un vez que hemos terminado el tratamiento, debemos tener en cuenta estos puntos:
- A menudo ocurre que cuando finaliza el tratamiento, el estado emocional mejora pero aparecen nuevos traspiés anímicos. Suele suceder que cuando se armonizan algunos estados negativos, van apareciendo otros.
- Si tras varias semanas de tratamiento no se nota cierta mejoría, no es preocupante porque insistimos en que no hay efectos nocivos, pero es el momento de volver a empezar y repasar las características de cada flor, ya que igual no hemos elegido el tratamiento floral adecuado.
- Dependiendo de la persona, de su situación, el tratamiento puede durar más o menos, sobre todo cuando nos enfrentamos a casos más agudos o graves. Sin embargo, en los casos más leves, en muchas ocasiones solo será cuestión de semanas o pocos meses.
- Una vez que iniciamos el tratamiento, debes saber que no hay una fecha exacta para dejar de tomar estas gotas, únicamente tendremos que valorar nuestro estado, con la ayuda del especialista que nos esté tratando, pero, no te preocupes por los efectos secundarios, ya que estas esencias naturales no dejan efectos, a su paso.
- Cuando nuestras emociones se armonicen, simplemente de una forma natural no tendremos al necesidad de tomarlas, incluso, se nos pueden ir olvidando las tomas. ¡Así sabremos que ha llegado el momento de dejar de tomarlas cada día!.
- Hay que tener en cuenta que se trata de un tratamiento que debemos realizar de una forma puntual, es decir, no deberá extenderse demasiado en el tiempo.
Ahora conoces mucho mejor Cómo Tomar las Flores de Bach, puedes comenzar a tratar y mejorar tu calidad de vida, ¡desde hoy mismo!.
Vivo en new jersey, quiero saber si me pueden contactar con algu n TERAPEUTA de flores de bach