Bajar de peso y conseguir una figura atlética o una buena línea es un objetivo que persiguen millones de personas en el mundo. A los consabidos consejos de mantener una dieta sana y equilibrada y practicar actividad física de manera periódica se le suma la ingesta de suplementos deportivos.
Entre los suplementos deportivos más exitosos están los llamados quemagrasas, y a continuación os damos a conocer más sobre estos productos y explicamos por qué tienen tanto éxito.
Cómo podríamos definir un quemador de grasa
A diferencia de lo que la gente cree, los productos quemagrasas, que existen y muchos de ellos son muy eficaces, no son un producto milagro y ayudan por sí solos a reducir la grasa, sino que cumplen su cometido dentro de un contexto general en el que participan otros factores, los ya comentados de dieta y ejercicio físico.
Los agentes quemagrasas son productos que tienen un efecto acelerador del metabolismo pero su capacidad para eliminar la grasa es mucho menor que la que aparece en publicidad. El término quemagrasas procede del inglés «Fat Burner» y se puso de moda en los años 90, cuando el auge del culturismo comenzó a florecer.
En la actualidad, muchos aficionados al fitness toman estos productos, así como personas que quieren eliminar el exceso de grasa.
¿Cómo funcionan los quemadores?
El funcionamiento de estos productos es sencillo. Son una mezcla de ingredientes con diferentes propiedades, unos aceleran el metabolismo mientras que otros transportan la grasa en las áreas de reserva hasta las mitocondrias, orgánulos celulares en donde se quema la grasa para producir más energía.
Al obtener energía a partir de la grasa, esta energía se puede quemar en sesiones de entrenamiento. Por esta razón, los quemagrasas son suplementos muy indicados para conseguir mejor rendimiento durante la actividad física.
Para que estos productos logren un efecto positivo, hay que mantener un estilo de vida activo, para quemar esa energía obtenida, de lo contrario, se vuelve a convertir en grasa.
Los llamados suplementos quemagrasas incorporan, dependiendo de us componentes, otras propiedades: algunos ayudan a regular el tiroides, otros tienen efectos diuréticos, estimulantes o supresor del apetito.
¿Qué suelen contener? Ingredientes principales o más utilizados
Existe una amplia variedad de componentes que forman parte de estos productos quemagrasas. Uno que no suele faltar nunca es la cafeína, por su capacidad estimulante. Además de la cafeína, la efedrina, la teína y otros estimulantes ejercen un efecto similar.
La carnitina es imprescindible porque es la molécula capaz de quemar las grasas, es decir, transportarlas hasta las mitocondirias y utilizarlas como energía. La carnitina o l-carnitina forma parte de suplementos quemagrasas y también se comercializa de manera individual, incluso en inyecciones aplicadas en la barriga.
El chitosán o quitosán es también un compuesto muy habitual en estos productos. Se le conoce como captagrasas y, en teoría, evita que las grasas ingeridas lleguen al torrente sanguíneo. Es un polímero muy presente en los crustáceos.
Otras sustancias muy comunes en los suplementos quemagrasas son el picolinato de cromo, algas ricas en fibra y yodo, plantas diuréticas o la garcinia cambogia.
¿Son realmente efectivos?
La eficacia de los quemagrasas depende mayoritariamente de la práctica deportiva. Sin ejercicio, estos productos no hacen nada, pues su principal característica es liberar grasas y transformarlas en energía, pero si esa energía no se quema, vuelve a almacenarse en forma de grasa.
Los deportistas con altos niveles de entrenamiento acuden a estos productos en época de competición para definir el músculo y eliminar el exceso de grasa.
No existen milagros quemagrasas, sino productos que pueden resultar más o menos eficaces dependiendo del nivel de actividad física de cada persona.
Los mejores quemadores del mercado
Garcinia Cambogia, Zentrum 90
Suplemento alimenticio con función quemagrasas elaborado a partir de garcinia cambogia como prinicpal componente. Esta planta de origen asiático funciona como quemador de grasas natural.
El suplemento tiene también un efecto supresor del apetito al producir sensación de saciedad y disminuir la ansiedad por comer. Garcinia Cambogia de Zentrum 90 incluye 90 cápsulas y está pensado como un suplemento dietético para adelgazar, con alto contenido en ácido hidroxicítrico.
Las indicaciones del fabricante son tomar dos o tres cápsulas al día, una o dos antes de la comida y una antes de la cena. No se deben superar las dosis indicadas y este suplemento no debe actuar como sustituto de una dieta completa y equilbrada.
FatBurner Pro DUAL
Quemagrasas de efecto rápido que combina cinco ingredientes activos: extractos de garcinia cambogia, té verde, granos de café verde, ácido linoleico conjugado y aceltil l-carnitina. No incluye cafeína ni guaraná y no produce efectos secundarios.
Afirma ser un suplemento capaz de hacer reducir el nivel de grasa sin pasar hambre por su efecto supresor del apetito. Sus componentes permiten liberar la grasa y transportarla hasta las mitocondrias para quemarlas y transformarlas en energía. El té verde y el café tienen propiedades estimulantes que aceleran el metabolismo.
Las indicaciones del fabricante son las de tomar tres cápsulas diarias entre 30 y 60 minutos antes de las comidas con un vaso de agua. Es un producto apto para veganos.
L-Carnitina, NaturNatura
Suplemento elaborado a partir de l-carnitina que presenta este componente como ingrediente principal. El bote incluye 120 cápsulas con 1.000 mg de carnitina por cápsula.
La carnitina ayuda a movilizar y transportar las grasas de reserva acumuladas hasta el interior de las células aumentando el gasto energético. Se trata de un suplemento muy efectivo si se ingiere como apoyo a una dieta sana con suficiente práctica deportiva.
La carnitina de NaturNatura ayuda en la práctica deportiva a aumentar los niveles de resistencia y energía. La dosis diaria recomendada es tomar dos cápsulas al día unos 30 minutos antes del entrenamiento.
Posibles efectos secundarios
Aunque la mayoría de agentes quemagrasas cumplen su cometido en ciertas circunstancias y no son peligrosos para la salud humana, siempre que se ingieran atendiendo a dosis recomendadas, los quemadores de grasas pueden genearar algunos efectos secundarios que a continuación describimos.
La mayoría que quema grasas aumenta los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Esto puede llevar a gente que padece episodios de ansiedad a sufrirlos con más frecuencia, y añadir a estos síntomas el insomnio, las palpitaciones y los mareos.
El insomnio está provocado por las sustancias estimulantes de los quemadores de grasas: la cafeína y la efedrina. Estas sustancias aumentan el ritmo cardíaco y aceleran el metabolismo, que interfiere con el suelo de manera negativa.
Un tercer efecto secundario asociado al ritmo más acelerado del metabolismo es la presión arterial elevada. La efedrina y la cafeína provocan hipertensión arterial.
Por último, algunos quemagrasas pueden aumentar el riesgo de deshidratación, que se traduce en dolores de cabeza.
Contraindicaciones y precauciones
Atendiendo a los posibles efectos secundarios, este tipo de suplementos no están indicados para personas que sufren problemas de ansiedad o aquellas que padecen problemas de tensión.
Del mismo modo, las personas que tienen problemas de insomnio, deben consultar con un especialista antes de iniciar un tratamiento con estos productos.
Las principales precauciones pasan por no seguir tratamientos farmacológicos que no tengan registro oficial y donde no estén especificados la composición cuantitativa y cualitativa de sus componentes, evitar los productos que se hacen llamar productos milagro y no dejarse engañar por dietas rápidas.
El proceso de eliminación de grasa no es fácil y depende en gran medida de la actividad física, puesto que lo que necesita el organismo es un nivel de metabolismo alto para quemar ese exceso de grasa.
Algunos quemagrasas se muestran muy eficaces, pero para conseguir este efecto hay que mantener una dieta sana y un ritmo de vida activo mediante la práctica periódica de actividad física